Con Hillary y con los kelpers

La canciller dio una charla en una universidad y volvió a mostrar su mayor afinidad con la candidata demócrata. Respecto de Malvinas, mostró otro cambio en la posición argentina y se posicionó a favor de tener en cuenta la opinión de los isleños.

La canciller Susana Malcorra volvió a señalar que el Gobierno estaría “más cómodo” si la victoria fuera de la demócrata Hillary Clinton. “Las elecciones de Estados Unidos condicionan al mundo y lo que pase allí nos afecta a todos”, indicó la canciller, quien señaló que Clinton y Donald Trump reflejan “dos visiones distintas de cómo debiera ser el mundo”. También se refirió al conflicto por la soberanía de las Islas Malvinas y destacó que no se puede ignorar a los isleños.

Malcorra habló en una conferencia en la Universidad Torcuato Di Tella titulada “La política exterior argentina: determinantes y prioridades”. Como ocurrió en otras oportunidades, dio indicios de que la relación sería más fluida en una continuidad entre el gobierno de Barack Obama y Hillary Clinton. “Todo indica que la posibilidad de que Hillary Clinton gane es muy alta”, indicó ayer Malcorra. De todas formas, dijo que prefería ser “muy cautelosa” respecto de los resultados, dado que podría existir un “voto vergüenza” a favor de Trump.


En un programa de televisión, la ministra señaló que “dependiendo de los resultados” de los comicios en Estados Unidos, “podría haber grandes cambios” y “un gran parate” en la relación bilateral entre los gobiernos de Buenos Aires y Washington. Malcorra no dejó dudas: dijo que si ganara Trump, ello puede generar “un viraje” que “nos ponga en posiciones de visión estratégica casi opuestas”.

En la charla universitaria, Malcorra también se refirió a la disputa por la soberanía de las Malvinas. Sostuvo que ese diferendo no debe ser “un impedimento para avanzar en una agenda propositiva” con el Reino Unido y avanzar en acuerdos para traer inversiones al país. “Centralizar toda la relación con el Reino Unido en el tema Malvinas es una visión parcial”, advirtió la funcionaria PRO. No obstante, Malcorra indicó que la cuestión Malvinas es “un claro tema de soberanía, de discusión territorial entre dos estados”. Destacó que pese a que hay una “discusión territorial, tampoco podemos negar la existencia de habitantes en las Malvinas con los cuales hemos estado distanciados mucho tiempo”. “Negar la existencia de los otros solo impide ir a una solución en el tema Malvinas. La oportunidad del encuentro es para resolver problemas”, afirmó la canciller.

Históricamente, la posición argentina fue de no reconocer para este caso la teoría de la “autodeterminación de los pueblos” porque los kelpers, los habitantes de las islas, son una población trasplantada, no originaria. En cambio, el Reino Unido sostiene lo contrario y hasta alentó unos años atrás que los isleños realizaran un referéndum para que votaran si querían seguir siendo británicos. Argentina, obviamente, ignoró el resultado.

“Hay un gran interés del Reino Unido en invertir y tener negocios con la Argentina y nos pareció que la cuestión Malvinas no debía ser un impedimento para ello. El vínculo con Gran Bretaña es muy importante. El Reino Unido es un jugador en el mundo de peso y tiene lazos históricos con la Argentina”, indicó. Señaló que el Gobierno anterior tenía una “visión del mundo alineado desde lo ideológico y eso restaba oportunidades”.