Presión a Londres para frenar a Malcorra como candidata ONU

(ambito.com) INTENTO POR SEMBRAR DUDAS SOBRE LA INDEPENDENCIA DE LA CANCILLER
La posibilidad de un encuentro entre May y Macri en el G-20 alentó el lobby de la derecha británica y estadounidense contra Malcorra. Excusa, Malvinas.

Susana Malcorra
La presión sobre el gobierno británico contra la candidatura de Susana Malcorra a la ONU ya comenzó. Lo dejó en claro una editorial que publicó ayer "The Huffington Post", con la firma de Luke Coffey (Director de Política Exterior de la Heritage Foundation, think tank de la derecha estadounidense con brazos en Europa). Allí se describe a Malcorra como una candidata a la ONU que debería provocar alarma y recomienda al gobierno de Londres bloquear la nominación. El artículo da tres razones, "desde un punto de vista británico" para argumentar sobre la inhabilidad de la Canciller argentina para cubrir el cargo de Secretaria General. En los tres casos el razonamiento es mas un insulto para la Argentina que una crítica a Malcorra: "ella sirve como Canciller a un país que tiene en su pasado haber utilizado a la ONU para emplear a políticos dudosos, agendas ocultas y un muy obsoleta visión del mundo para aplastar el derecho a la autodeterminación de las Falkland y la soberanía británica sobre las islas".


"No se equivoquen: la cuestión de las Fankland es un tema muy querido para los argentinos", insiste el comentario. La editorial es un síntoma a seguir: es la primera vez que aparece la derecha británica enviándole un mensaje directo a la primer ministra Theresa May sobre la inconveniencia de la candidatura de Malcorra y es una señal de reacción tras la carta que se conoció donde el gobierno británico aparece dispuesto a hablar con Mauricio Macri sobre ampliación de vuelos a las Malvinas a cambio de negociar las condiciones de explotación petrolera en las islas en conversaciones que podrían darse en la próxima ronda del G-20.

En la segunda votación secreta entre los miembros de la ONU Malcorra quedó tercera, es decir subió 5 posiciones con relación al primer escrutinio. En primer lugar se volvió a ubicar Antonio Guterres con 11 votos a favor y dos de "desaliento". Segundo quedó el serbio Vuk Jeremic, con 8 votos a favor, 4 en contra y 3 abstenciones. Y el tercer lugar fue para Malcorra con 8 votos a favor, 6 de desaliento y una abstención. La clave del tanteo de estas votaciones, se sabe, esta en esos votos en contra y especialmente en adelantar la posición de los cinco miembros del Consejo de Seguridad que en octubre, cuando se haga la elección, podrán aplicar su derecho de veto.

Rubén Rabanal