El futuro canciller uruguayo se define como "amigo" de Argentina


Nin Novoa con Tabaré Vázquez(infobae.com).- Rodolfo Nin Novoa lamentó, no obstante, que el país vecino haya tomado medidas "inamistosas". Apuntó que la relación dependerá del gobierno posterior al de Cristina Kirchner.                                                                                                                          "Siempre hemos sido muy amistosos con los argentinos", señaló hoy el futuro ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, con respecto a la oportunidad de mejorar las relaciones bilaterales con la Argentina tras el cambio de gobierno.


Sin embargo, el ex vicepresidente de Tabaré Vázquez lamentó que el país vecino "a veces haya tomado algunas medidas que son legítimas, pero que son inamistosas para Uruguay", a pesar de que su país le ha cooperado en otros aspectos.


"Nosotros nos solidarizamos con ellos (los argentinos), no dejamos llegar los barcos que vienen de las islas Malvinas y nos perjudicamos. Hay una doble mano, seamos amistosos, y si querés que te dé, dame", achacó Nin Novoa en declaraciones a la Radio Carve de Montevideo.

Las autoridades uruguayas accedieron a un pedido argentino e impiden la llegada a puertos uruguayos de buques provenientes de las islas Malvinas, cuya soberanía derivó en un conflicto bélico entre la Argentina y el Reino Unido en 1982, que hasta tiempo atrás operaban y se abastecían en el país.

"HAY UNA OPORTUNIDAD PARA MEJORAR LAS RELACIONES CON ARGENTINA"
Vázquez, quien ya gobernó Uruguay entre 2005 y 2010 durante un período de tensiones con la Argentina, fue elegido este domingo en ballottage. El martes por la tarde anunció el que sería su gabinete cuando asuma, el próximo 1° de marzo de 2015.

Nin Novoa mantiene una buena relación con el gobernador de la provincia de Buenos Aires y precandidato presidencial para las elecciones argentinas de 2015, por lo que deslizó que habría "mucho contacto" entre ambos, en caso de que suceda a Kirchner en el Ejecutivo.


Las relaciones entre Uruguay y Argentina vivieron su peor momento durante los gobiernos de Vázquez y el fallecido Néstor Kirchner por la oposición de las autoridades argentinas a la construcción de la planta de celulosa de UPM (ex Botnia) en la margen oriental del río Uruguay. El conflicto derivó en un juicio frente a la Corte de Internacional Justicia (CIJ) de La Haya, que en 2010 determinó que la planta no contaminaba.

En los últimos años, los gobiernos del presidente José Mujica y Cristina Kirchner también tuvieron varios roces por medidas argentinas consideradas "discriminatorias" por las autoridades uruguayas, desde las trabas a la salida de turistas, el control sobre el dólar que afecta las exportaciones y el dragado de canales de uso común en el Río de la Plata, entre otras.

La autorización, hace poco más de un año, de la administración de Mujica para que la planta aumentara su producción de celulosa pese a la opinión en contrario de las autoridades argentinas volvió a caldear los ánimos y el gobierno de Kirchner amenazó con volver a la Corte de La Haya, algo que finalmente no hizo.